LÁGRIMAS DE ORO de José Luis Gil Soto
(eBiblio, 2022)
Me ha impresionado como José Luis
Gil narra con emoción y maestría la conquista de Perú por Francisco Pizarro y
poco más de 160 hombres, aprovechando el desconcierto que causan en los incas
los caballos (y, sobre todo, al galope), los fieros perros de guerra, los
estampidos y la humareda de los arcabuces y cañones, las cortantes espadas y la
valentía de estos españoles que estaban al borde de la extinción pues, si no
salen a la desesperada, hubieran sido masacrados por el enorme y aguerrido
ejército, que esperaba de Atahualpa la orden de atacar.
Lo hacen prisionero, lo tratan
muy bien, incluso entabla amistad con españoles cercanos a Pizarro. Pero es
ajusticiado, porque las tribus a las que había masacrado con una crueldad
inaudita (exterminaba a todos incluidos niños, mujeres y ancianos y los colgaba
de los árboles para público escarmiento) en contra de la opinión de Pizarro,
que también le había cogido aprecio.
Esta narración es otro buen
ejemplo de la utilidad de la novela histórica que cuenta la historia completa
sin zonas oscuras, pues el autor las investiga y, después de meditarlo, se
decide por una explicación coherente. De tal forma que, si no toda la historia
es real, sí es lo más parecido a lo que debió suceder en esos puntos
desconocidos. Con lo que hacen un enorme favor al conocimiento del pasado y la
historia es más creíble sin lagunas.
OS SALVARÉ LA VIDA de Joaquín Leguina
(Barcelona, Espasa,
2017. eBiblio, 2022)
Joaquín Leguina, el autor y expresidente de la Comunidad de Madrid en la democracia, realiza un buen trabajo como escritor en Os salvaré la vida, pues recrea con fidelidad el ambiente bélico y la actuación de las personas en el Madrid cercado.
DE NINGUNA PARTE de Julia Navarro
(Barcelona, Plaza y
Janés, 2021)
Es un libro interesante, cuyo
contenido resulta familiar al lector porque lo ha oído tan frecuentemente que puede
parecerle que conoce con seguridad las claves de su argumento (el problema
palestino-israelí) y no es siempre así. De ahí que interese leerlo de una forma
amena y clara como lo expone Julia Navarro en la trama de este libro titulado De
ninguna parte.
Los judíos, perseguidos desde los tiempos bíblicos y hasta el exterminio nazi, acumulan razones más que suficientes para anhelar una patria, que para ellos no puede situarse en otro lugar que, por razones históricas, no sea la región de Palestina con centro en Jerusalén, habitada en buena parte por árabes. Con tal excusa los judíos se apropian en 1948 del 78% del territorio palestino. Y ahí radica el problema que se ha vuelto irresoluble, pues Israel es un estado fuerte, muy bien preparado militarmente, que es consciente de estar rodeado de enemigos, a los que hasta ahora ha logrado vencer clara y contundentemente en varias ocasiones.
Ante este hecho constatable la
única salida que encuentran los palestinos es la violencia, pues los intentos
pacíficos de solucionar la cuestión durante más de 70 años no han producido
avances en la solución del conflicto. Pero la violencia solo genera
destrucción, dolor y odio como el que sufre el protagonista de este libro,
huérfano como resultado de una operación del ejército israelí y desde entonces
enemigo acérrimo de los judíos, a los que jura destruir. Su proceso de
radicalización es el que cuenta De ninguna parte.
A esta lamentable situación,
además, se une la injerencia de Occidente en las cuestiones de países con una
cultura, la musulmana, radicalmente distinta a la cristiana. La una no
entiende, por ejemplo, las libertades individuales para comportarse como se
desea, y la otra parte no comprende que todo se supedite a la religión. Son dos
mundos distintos que debían haber respetado sus espacios mutuamente sin
inmiscuirse en asuntos ajenos y vivir en paz, pero intereses de todo tipo, que
superan a los originales, han propiciado que la solución hoy por hoy sea
inviable.
Y así el problema, en vez de
aminorar, aumenta: el terrorismo ataca, los afectados responden con más
violencia, se recrudecen los atentados, la respuesta es aún mayor... Es el
cuento de nunca acabar.
SANTA EVITA de
Tomás Eloy Martínez
(Madrid, Alfaguara,
2002)
Este libro es una original de
conocer la vida de Eva Perón con sus luces y sus sombras. Un ejemplo de persona
luchadora, que comienza desde la humildad de una familia de vástagos bastardos
y llega a los más altos puestos de la administración argentina como primera
dama de su esposo, Juan Domingo Perón.
Luego, su muerte temprana la convierte
en un auténtico mito social, político y religioso (de ahí el título), que
preocupa a las nuevas autoridades, pues temen que se convierta en una mártir.
Para evitarlo embalsaman su cuerpo, hacen copias para despistar a sus
seguidores y los entierran en lugares distintos, de tal forma que ahora no se
sabe con certeza dónde está el cuerpo real de Evita.
El libro hasta la mitad se lee
con agilidad y con avidez, pero después se enreda en los vicisitudes de su
embalsamamiento, de sus copias, traslados y de cómo afecta emocional y
psicológicamente a los militares encargados de custodiarlos y enterrarlos.
Entonces se hace repetitivo y un tanto plomizo, quizás alargado artificialmente
por imperativos editoriales, que literariamente lo muestran desequilibrado.
No obstante, es de alabar la
técnica empleada por el autor cuando entremezcla acciones del pasado con hechos
del presente, recurso que advierte cómo una persona normal como Evita se
agranda cuando tiene oportunidad de realizar mejoras sociales, quizás alentada
por su vida anterior cuando, primero en su pueblo y después en Buenos Aires, se
relaciona con gente que lucha como ella por sobrevivir en ambientes muy
precarios y conoce de primera mano las necesidades de la gente común.
MADONNA. UNA
BIOGRAFÍA de Los Prieto Flores e Isa Muguruza
(eBiblio, 2022)
También la cantante se ha sabido
rodear de gente apropiada y no porque haya creado un equipo fijo, sino porque
sabe encargar cada idea nueva a gente distinta (muchas veces, marginal) pero
con un elevado sentido de la música, de la moda y del arte.
Y lo curioso es que lo ha hecho
todo exponiendo abiertamente su concepción del sexo, la expresión sincera y la
multipersonalidad, sin importarle las condenas que le ha lanzado el poder en
múltiples ocasiones. Todo un ejemplo de persona libre, que no se conforma con
tener éxito y ganar dinero, sino con que la sociedad se deje de hipocresías y
permita a las personas expresarse sin los obstáculos interpuestos por sus
detractores, que muchas veces anulan la creatividad y el libre albedrío del ser
humano.
asalgueroc